En el transcurso de la jornada, las trabajadoras se han movilizado en los tres territorios, en Bilbao, Donostia y Vitoria-Gasteiz para denunciar esta situación. “Llevamos tiempo peleando para que todos los puestos que están vacantes se cubran, las bajas de nuestras compañeras siguen sin cubrirse; seguimos estando tres compañeras en los centros donde deberíamos estar cinco y cuando finalmente se contrata a una sustituta, le hacen contratos parciales para cubrir jornadas completas”.
Recuerdan que “el Gobierno vasco anunció que habría una partida económica reforzada para la limpieza. Pero lo cierto es que ese refuerzo no ha llegado. Al contrario, las empresas privadas están realizando modificaciones horarias y aumentando la carga de trabajo.”
Por otra parte, las trabajadoras han estado esta semana en comparecencia ante el Departamento de Enseñanza del Gobierno vasco, los sindicatos adbvertíasn que “el principal bloqueo de la mesa negociadora se encuentra en la retribuciónsalarial. Nosotras, tenemos un convenio de equiparación con elpersonal de menor nivel de la administración. no obstante, tenemos una diferencia salarial de unos2.300 euros anuales.” Y denunciaban que la patronal se niega a abonar las subidas recogidas en convenio. En el año 2019 y 2020 las empresas privadas se han negado a abonarlo.
Cargas de trabajo inasumibles
La situación de las trabajadoras de Limpieza de Enseñanza y UPV/EHU ha empeorado también con la pandemia. “Si antes de ella las cargas de trabajo que teniamos eran casi inasumibles, ahora se nos ha multiplicado el trabajo: limpieza de pomos, telefonos, sillas, interruptores, barandillas… Seguimos haciendo más trabajo pero con las mismas jornadas y esto también es precarizar el sector.”
Denuncian que aún hoy en día siguen teniendo problemas con los EPIS y la gestión de los positivos. “En nuestros centros de trabajo, colegios y universidad existen unas gelas, las llamadas gelas COVID, donde se introduce a todo alumno o trabajadr rsospechoso de COVID. Pero esas aulas las limpiamos con mascarillas quirúrgicas. Tanto las empresas privadas como Inspección de Trabajo entienden que nosotras no tenemos riesgo de alta exposición ante el COVID. Pero, ¿como es que no? cuando cada día se confinan gelas enteras? cuando trabajamos con centros llenos de alumnos? Nosotras seguimos sin dar credito de como se utiliza la esencialidad de un sector para lo que se interesa y no para velar por la salud de las trabajadoras. “
Los sindicatos terminaban su comparecencia exigiendo el control del dinero publico. “Exigimos que se cambie el criterio de los pliegos, que se dejen de priorizar los criterios económicos. Esta en manos de la Administración que estas empresas vuelvan a ser las concesionarias y si lo son, en que condiciones van a dar su servicio. Entendemos que el cumplimiento de los pliegos debe de ser de obligación y que, el que no lo cumpla no se podrá volver a presentar en los siguientes pliegos. necesitamos de voluntad política para solucionar este conflicto.”
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