Los representantes de UGT destacan como aspectos relevantes de la propuesta de la FVEM (Federación Vizcaína de Empresas del Metal), que la patronal ha puesto sobre la mesa negociadora, el incremento salarial del año 2022 en un 4,5% retroactivo al 1 de enero, con abono de atrasos dos veces) para nosotros insuficiente ya que pedimos que se tenga en cuenta la referencia al IPC para las subidas salariales, que el año pasado se situó en el 6,4%.
Por primera vez, la patronal incluye una clausula de revisión, aunque escasa ya que lo vincula al 80% del IPC acumulado en el periodo 22-24 supera el incremento aplicado, que proponen aplicar en tablas a 1 de enero de 2025 con un límite de un 2%.
Otros aspectos, también insuficientes para UGT, es el mantenimiento de la clausula de garantía mínima con valor del 50% del incremento de tablas y siempre que los salarios reales no superen el valor de tablas en un 15% y reducen en 30 horas su propuesta desorbitada de flexibilidad de jornada hasta 130 horas anuales.
Propuesta patronal insuficiente
Si bien hay un ligero avance sobre las posturas mantenidas hasta ahora por la FVEM, para UGT es positivo que la patronal haya movido sus planteamientos acercándose ligeramente a los sindicales, con aspectos como una clausula de revisión salarial vinculada a la evolución del IPC, cosa que hasta ahora la habían negado y que facilita el acercamiento del incremento salarial a la inflación, aunque sin garantizarla.
En definitiva, para UGT hay una parte negativa en la fórmula de incremento propuesta, que sigue sin acercarse a valores que garanticen el poder adquisitivo del personal afectado por el convenio. Otra cuestión son los aspectos de retroceso en las condiciones laborales del convenio 2019-2021: garantía mínima, complemento IT en accidente de trabajo y ampliación de la bolsa de horas de flexibilidad, se abordan pero muy ligeramente, quedando lejos de lo recogido en el convenio anterior y que desde nuestro punto de vista su mantenimiento en los términos allí regulados es fundamental.
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