Con la solicitud realizada ayer por el sindicato ELA a UGT y CC.OO para la validación de las adhesiones de trabajadoras al convenio de residencias de la tercera edad de Gipuzkoa, más del 95% del sector, compuesto por unas 4.000 trabajadoras, han avalado el convenio. Los responsables de UGT señalan que tan sólo una pequeña parte del colectivo, principalmente personal eventual o de subcontratas, aún no han suscrito la adhesión. “Esto se debe principalmente -puntualizan los responsables de UGT- a que desconocen el derecho que tienen a formalizar su adhesión”.
Este convenio que se firmaba en el mes de noviembre con la ausencia de los sindicatos nacionalistas, tiene carácter de eficacia limitada y cuenta hasta el 30 de diciembre de 2010 como plazo máximo para la adhesión de trabajadores.
Esta circunstancia provoca que tan sólo los afiliados a los sindicatos firmantes y aquellos trabajadores que quieran adherirse a título personal puedan disfrutar de las mejoras recogidas en el mismo.
Para UGT la solicitud de ELA, avala la postura mantenida por nuestro sindicato desde un principio que defendía que el nuevo acuerdo supone un buen marco de referencia para los trabajadores del sector que llevaban dos años sin convenio y que además contribuye a recuperar el poder adquisitivo que habían perdido durante ese periodo.
Los responsables de UGT de la Federación de Servicios Públicos en Gipuzkoa, lamentan las falsas promesas realizadas por el sindicato nacionalista tras la firma del convenio por UGT y CC.OO en las que se aseguraba que ELA lograría acordar un convenio con mayores mejoras.
Por todo ello UGT considera que el sindicato nacionalista ahora debería rectificar públicamente ya que tras demonizar públicamente hace unos meses el convenio y recalcar que era antidemocrático ahora parece estar dispuesto a solicitar las validaciones de adhesión de trabajadores del sector.
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