Movilizaciones de los trabajadores de Intraplas, en Alonsotegi, en defensa de sus puestos de trabajo

El contencioso se mantiene desde diciembre del 2008, en que Intraplas pretendió despedir a 18 trabajadores, con la oposición del comité de empresa. El expediente fue denegado por el Juzgado Mercantil.
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Los trabajadores de la empresa Intraplas de Alonsótegi (Bizkaia), van a realizar mañana, jueves 3, a partir de las 11.00h. de la mañana, una marcha desde el polígono industrial donde está ubicada, en la carretera Bilbao-Balmaseda, en el kilómetro 9, hasta el Ayuntamiento de la localidad, para pedir el apoyo de la Corporación y hacer entrega al alcalde de las demandas de los trabajadores, en el contencioso que mantiene abierto con la empresa, dedicada a la transformación de materiales termoplásticos destinada a línea blanca y automoción. El Comité tiene la intención de mantener en el tiempo las movilizaciones, que se inician mañana.

El contencioso se mantiene desde diciembre del 2008, en que Intraplas pretendió despedir a 18 trabajadores, con la oposición del comité de empresa. El expediente fue denegado por el Juzgado Mercantil.

La empresa inicia entonces el proceso de comunicar a los clientes la intención de abandonar de inmediato la actividad, lo que, según el comité, provoca la espantada de los clientes y la retirada de casi todos los moldes, básicos para mantener la producción.

Con la actividad paralizada, la empresa intenta un nuevo expediente para despedir a todos los trabajadores, que también fue denegado por el Juzgado Mercantil ante la oposición del Comité de Empresa. Paralelamente, los trabajadores ganan una sentencia que declara que Intratas forma grupo empresarial con Gonar, Anitya y Atxo, mercantiles que se formaron con el capital de Intraplas y que continúan funcionando en Legutiano (Alava).

Los trabajadores denuncian que los empresarios han descapitalizado Intraplas y traspasado a las empresas del grupo en torno a 2 millones de euros provenientes de la venta del pabellón industrial a las empresas del grupo.
Pese a que el Comité de empresa ha ganado todas las batallas legales, la situación se va haciendo insostenible, al paralizar la actividad la propia dirección de la empresa. “La actuación de los empresarios -manifiestan representantes del sindicato- es una burla al sistema jurídico laboral y un nuevo ejemplo de capitalismo especulativo causante de la crisis económica”.

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