Ana Vázquez, responsable de Sanidad de UGT-Euskadi, recuerda a la Consejería de Sanidad que este sindicato siempre ha exigido transparencia y, para ello, propuso ya en 2018 un cambio en las convocatorias, desligando a los tribunales de preparar los exámenes y proponiendo a expertos de otras administraciones públicas, ajenos a la OPE, para dar las máximas garantías a los opositores.
La representante de UGT asegura que «lamentablemente, Osakidetza no ha activado esta medida ni ninguna otra, que evite que quienes forman parte de los tribunales y preparen los exámenes, puedan volver a ser cuestionados, como ya ocurrió en la OPE anterior «.
No obstante, UGT valora positivamente el esfuerzo realizado por Osakidetza en la preparación de la OPE 2018-19, por llegar a acuerdos y en la claridad de criterios a la hora de asignar el número de plazas para cada categoría profesional. «Algunas de las categorías, como oficial de mantenimiento, electromedicina, óptico-optometrista, terapeuta ocupacional no se hubieran convocado sin la aportación y negociación llevada a cabo por UGT en sucesivas mesas sectoriales», manifiesta Ana Vázquez.
A pesar de estas medidas, UGT no puede amparar una OPE que se convoca ya con dudas sobre el proceso y su transparencia. En los procesos llevados a cabo en la última OPE, la propia fiscalía señalaba la confección de los exámenes como una de las cuestiones clave en las filtraciones. Ana Vázquez advierte que «Osakidetza debe de poner fin a esta forma de realizar los exámenes, para garantizar una selección imparcial que garantice la igualdad de oportunidades en el acceso al empleo público, imprescindible para el fortalecimiento de los servicios públicos y minimizar al máximo la temporalidad de Osakidetza».
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