Los datos del IPC de enero, publicados hoy por el Instituto Nacional de EstadÃstica (INE), sitúan la inflación anual en Euskadi en un 3,5%, una décima más respecto al mismo mes del año anterior y por encima de la media nacional situada en 3.4%. En términos mensuales la inflación ha aumentado un 0,1% en Euskadi. De esta manera se produce un ligero repunte del crecimiento de precios que hace que aquellas personas con ingresos más bajos sigan pasando apuros. Ante esta situación Dani González, Secretario de PolÃtica Sindical e Institucional de UGT-Euskadi señala que resulta imprescindible seguir trabajando para impulsar subidas salariales en los convenios, incluyendo siempre cláusulas de revisión eficaces, que permitan paliar el ahogo económico que sufren muchas familias frente a los vaivenes de la inflación.
La mayor contribución al alza a la variación mensual de las tasas anuales del IPC proviene de la alimentación, uno de los sectores que más impacto tiene sobre la economÃa familiar y que llega a ser inasumible para muchos bolsillos. Este repunte se debe esencialmente al encarecimiento anual de la electricidad asà como del precio del aceite de oliva que continúa en una escalada de precios interminable.
Por ello para el responsable de UGT-Euskadi también es imprescindible seguir manteniendo la dinámica de subida del salario mÃnimo interprofesional, ya que desde que el SMI alcanzó el umbral de los 1000€, hasta los 1.134 actuales, se ha experimentado un mayor gasto de las familias que ha permitido aumentar la capacidad adquisitiva de las personas trabajadoras reforzando el consumo de los hogares y, con ello, el crecimiento económico.
Sin embargo advierte que sino se ejerce un estricto control sobre los márgenes excesivos de beneficios, puesto que muchas compañÃas a menudo aprovechan la coyuntura para elevar sus ganancias de manera desproporcionada, el esfuerzo realizado sobre el SMI no servirá de nada.
Impactos: 7