En comparecencia parlamentaria, en Vitoria-Gasteiz, UGT-Euskadi ha señalado la reforma laboral y, con ella, las condiciones laborales precarias como una de las principales causas del aumento de la siniestralidad laboral en nuestra Comunidad autónoma, dado que la recuperación económica y del empleo se basa en una contratación cada vez más temporal y precaria.
Esperanza Morales, Secretaria de Salud Laboral de UGT-Euskadi, y Jesús García de Cos, técnico del Departamento han constatado con datos el incremento de la siniestralidad laboral desde 2014 y los dos primeros meses de 2018, que está siendo especialmente trágico, con 10 víctimas mortales. “Es una reacción en cadena, –advierte- hay que alcanzar los objetivos haciendo más con menos, lo que provoca mayor nivel de exigencia y de estrés y, por ende, que aumente el riesgo a sufrir un accidente o una enfermedad laboral.
La falta de recursos influye también en una precaria formación e información. “La salud laboral no se puede ver como un coste, sino como una inversión. Debe de existir un compromiso firme y decidido por la salud laboral y la prevención, más allá de disponer de la documentación para no tener problemas con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. En muchos casos parece que las sanciones salen más a cuenta que aplicar los mecanismos de prevención”.
UGT-Euskadi asegura que no se ha conseguido integrar una verdadera cultura preventiva, especialmente en las PYMES y, con ello, se está detectando el incumplimiento del deber de coordinación de actividades empresariales en el caso de contratas, subcontratas y trabajadores autónomos. “Y los servicios se externalizan cada vez mas”.
El sindicato hace responsables del aumento de la siniestralidad laboral, en ocasiones por acción y en otras por omisión, a la empresa como empleador; a las mutuas colaboradoras que se regulan más en términos de costes que de salud en el caso de bajas laborales (IT), principalmente.
Y propone, entre otras medidas, ejercer acciones de vigilancia y control de la normativa vigente, con la participación activa de los sindicato, mediante al implantación de la figura del delegado territorial de Prevención de Riesgos laborales, para llevar la prevención a las pequeñas empresas; así como el cumplimiento real y efectivo de la coordinación de actividades empresariales y, entre otros, un aspecto fundamental para el sindicato es la reforma del Real decreto 1299/06, para hacer aflorar las enfermedades profesionales, con la lista de Enfermedades Profesionales que el 25 de marzo de 2010 revisó y aprobó la OIT. Unido a ello, mejorar las fuentes de información para permitir una mejor identificación de colectivos, actividades y empresas con riesgo de enfermedad profesional.
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