Los sindicatos convocantes de las movilizaciones exigen a los diferentes partidos políticos “la defensa y atención de las necesidades de los empleados/as públicos que se dejan día a día la piel para dar un buen servicio a la ciudadanía, “Cuidar al Cuidador” frases especialmente bonitas pero que cuando llega la hora de demostrarlo con el Presupuesto General Estatal y autonómico no se aplica.”
En el escrito denuncian que los Empleados Públicos han tenido una pérdida del poder adquisitivo de hasta un 20% en los últimos años. “Estos nuevos presupuestos ahondan aun más en la brecha salarial, si tenemos en cuenta la inflación que no cesa y las previsiones de crecimiento para 2021(+6,3%) y 2022 (+5,9%), estimamos que existe margen suficiente para un mayor incremento salarial que el que quieren aplicar del 2% y más cuando el incremento que hemos tenido en el 2021 ha sido tan solo del 0,9%”.
Estos sindicatos advierten que los partidos políticos con representación en el Parlamento Vasco y español deben posicionarse claramente en mejorar las condiciones laborales y sociales de los empleados públicos y manifiestan que están abiertos y “es posible aún un acuerdo plurianual que permitiera la inclusión de clausulas de garantía que lo hicieran posible, pero -lamentan- la imposición es hoy por hoy el lema de estos Presupuestos.”
Para UGT, ERNE y EUSPEL, los presupuestos actuales no dan salida a medidas de conciliación salarial y laboral, obsoletas desde hace mas de 11 años, donde no se da posibilidad a flexibilidad horaria, permisos de acompañamiento a menores, ni se apuesta por el teletrabajo, son presupuestos que no cuidan a los empleados públicos que se han dejado la piel con la crisis sanitaria.
“No queremos aplausos, exigimos más crecimiento salarial, más derechos, más igualdad, más recuperación, mas justicia, más dignidad para los trabajadores y trabajadoras de los servicios públicos”. Y recuerdan que los empleados públicos “protegemos y garantizamos la seguridad, educamos, formamos, atendemos, curamos, cuidamos, somos los servicios esenciales de todos y todas, “el Parlamento debe constatar en los Presupuestos que se preocupa y que comparte las necesidades del personal que da dichos servicios a la ciudadanía”.
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