Un año después de la firma del Acuerdo Interprofesional de negociación colectiva, seguimos en la misma situación, más de 350.000 trabajadores/as vascos tienen sin actualizar sus salarios, porque no se firman sus convenios. Para que este acuerdo hubiera obtenido resultados, las patronales vascas tendrían que haber dado pasos hacia el acuerdo, flexibilizando sus posturas en la negociación y no quedarse en la postura cómoda que esta situación les da. Por otro lado, los sindicatos nacionalistas deberían optar de verdad por la negociación colectiva sectorial, que ha sido en Euskadi la que amparaba a más trabajadores.
La Secretaria de Política Sindical e Institucional de UGT-Euskadi, Maribel Ballesteros, recuerda que el objeto del Acuerdo es el de dar prioridad aplicativa a los convenios de Euskadi frente a los estatales, “pero si no se llega a acuerdos en el ámbito de la negociación colectiva de Euskadi, difícilmente puede cumplir con suobjetivo”. La consecuencia, a día de hoy, es que el 47,3% de los trabajadores/as vascos con convenio vigente, ya sea de empresas o sectorial, tienen un convenio de ámbito estatal que regula sus condiciones laborales “y eso con suerte, pues en caso de no existir convenio estatal lo que queda es la individualización y congelación de las condiciones laborales”.
UGT-Euskadi ya advertía en la firma del Acuerdo Interprofesional en relación con la estructura de la negociación colectiva en el ámbito de la CAPV, que este acuerdo sería papel mojado si no se abordaba inmediatamente la negociación de los convenios colectivos sectoriales que llevan bloqueados, en algunos casos, años, porque son los convenios sectoriales los que dan cobertura a mayor número de trabajadores/as. “La estrategia exclusiva de la negociación colectiva empresa por empresa se ha demostrado inútil a la hora de renovar y actualizar las condiciones laborales de miles de personas. Más de 350.000 trabajadores/as -advierte Maribel Ballesteros- no van a tener nunca opción a un convenio de empresa, por las propias características de las mismas, pequeñas empresas con menos de 6 trabajadores o sin representación sindical”.
La negociación ha avanzado en Álava, un territorio donde UGT tiene más representación, “de los 21 convenios sectoriales, se han firmado 13; por contra, en Gipuzkoa, con mayoría de ELA y LAB, de los 48 sectoriales solo están actualizados 8; y en Bizkaia, de los 49 posibles, únicamente 10. Un panorama dramático en el que 350.000 trabajadores han perdido poder adquisitivo y condiciones laborales por la dejación de los sindicatos nacionalistas, una actitud ante la que la patronal se siente muy cómoda.
En Euskadi son 110.000 los trabajadores/as que tienen su convenio decaído y no tienen tampoco convenio superior que ampare sus condiciones laborales. De estos, el 50% (55.000 trabajadores/as) son guipuzcoanos.
Maribel Ballesteros advierte que “lejos de ser un drama, para muchos trabajadores/as vascos, el que existan acuerdos en los convenios estatales y que se les aplique a ellos es la única opción que en estos momentos tienen para actualizar sus salarios y condiciones laborales, pues el abandono que han hecho de los convenios vascos los autodenominados sindicatos mayoritarios, no les deja otra salida. Ya no se sostiene el mantra utilizado de que por ser un convenio estatal es “malo”, aún cuando mejore las condiciones de los trabajadores/as de aquí, pues frente a esa situación sólo se le ofrece el abismo del vacío de una negociación colectiva vasca que fue referente durante muchos años en todos los ámbitos, tanto estatales como autonómicos”.
La negociación de los convenios es la mejor herramienta que tenemos lossindicatos para acordar subidas salariales, atajar la desigualdad y el deterioro del mercado de trabajo, donde la temporalidad va creciendo.
Es muy necesaria la subida de salarios, porque si suben los salarios aumenta el consumo de los trabajadores/as, mejora el sistema de pensiones y sube la recaudación de las administraciones públicas, tan necesaria para mantener nuestra Sanidad pública, Educación, RGI… Todo lo que constituye nuestro Estado de Bienestar”.
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