La subida del 0,6% del IPC en octubre, en Euskadi, confirma que la subida de apenas una décima del de setiembre era un dato coyuntural y sitúa la inflación en lo que va de año en el 2,2% (2,5 en un año), por lo que es un dato desfavorable para los trabajadores vascos y en especial para el 55% de los asalariados todavÃa sin convenio vigente.
Pilar Collantes, Secretaria de Acción Sindical de UGT-Euskadi, advierte que “sigue sin observarse un cambio de tendencia favorable en la evolución del IPC, dado que la bajada de carburantes se debe a un hecho coyuntural y no a que los Gobiernos hayan establecido medidas para el control de la inflación”.
Para la responsable de UGT-Euskadi, los grandes perjudicados seguimos siendo los asalariados, porque los precios crecen por encima de lo que lo hacen nuestros salarios y a esto hay que añadir la subida del precio del dinero, que endeuda más las economÃas familiares, “por eso seguimos defendiendo las cláusulas de revisión en los convenios, ya que aunque se moderen los precios del petróleo, nuestra inflación sigue siendo muy elevada y superior a la media de la zona euro”.
Impactos: 33