Martes, 3 de diciembre de 2013
Los datos oficiales de desempleados/as vascos /as en noviembre, dados a conocer hoy, constatan que la contratación sigue a la baja y la precariedad sube en nuestra Comunidad autónoma, por lo que UGT-Euskadi sigue reclamando al Gobierno Vasco para que abra un proceso de dialogo con sindicatos y empresarios con el fin de abordar un Plan de Empleo consensuado entre todos, no impuesto como el que pretende poner en marcha.
UGT-Euskadi considera un pequeño respiro los datos del paro de hoy, una bajada de 3.567 (-2%) desempleados en la CAV, pero claramente insuficiente, pero hay que tener en cuenta que los datos de los últimos 12 meses nos ponen sobre la mesa una dura realidad: que el paro en el último año sigue creciendo y noviembre se cierra con un incremento interanual del 2,12%.
El responsable de Empleo y Formación de UGT-Euskadi, Felipe García, señala que el número de parados baja en las tres territorios; por sectores sigue siendo el sector servicios (-2.711), seguido de la industria y la construcción, los más afectados y destaca el negativo comportamiento de la contratación. “Se han hecho 21.701 contratos menos -afirma- que en el mes anterior, un -28,31%, destacando el fuerte descenso en Álava con un -46,62%. Y la calidad de la contratación sigue siendo una de las asignaturas pendientes, solo el 6,15% de los contratos son de carácter indefinido.
UGT-Euskadi alerta de la necesidad de no caer en optimismos gratuitos, con 174.700 parados en la CAV. “No se puede dejar la creación de empleo en manos solo de la iniciativa privada, se necesitan medidas dinamizadoras de nuestra economía, desde el sector público, que revitalicen nuestro tejido productivo, por lo que es urgente que el G. Vasco reconsidere la estrategia marcada en su Plan de Empleo”.
El sindicato hace también un llamamiento al Ejecutivo autónomo para que dedique sus esfuerzos a fortalecer las políticas de apoyo a los desempleados, formación, orientación, apoyo a los nuevos emprendedores, etc., en lugar de dedicar su tiempo a perseguir a los perceptores de rentas sociales, generando confusión y poniendo en tela de juicio dichas prestaciones.
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