De esta manera las cifras reflejan un aumento del desempleo en Euskadi de 2.733, que sumados a los 24.475 de marzo, abril y junio son un total de 27.208 los trabajadores/as que se han quedado sin empleo desde que se inicio el estado de alerta sanitaria por el COVID-19, a mediados de marzo, con lo que nos situamos en 144.448 los desempleados registrados a finales de mayo. Así mismo también resulta significativo los datos de afiliación a la Seguridad Social en los que se refleja un descenso de 3.993 personas en Euskadi, cuando en la mayoría de las Comunidades Autónomas se ha producido un aumento.
Ante esta situación Maribel Ballesteros, Secretaria de Política Sindical de UGT-Euskadi, muestra su preocupación y manifiesta su disposición a trabajar conjuntamente con el Gobierno Vasco, el resto de instituciones vascas y los agentes sociales para conseguir lo antes posible un Plan de Empleo y de Reactivación Económica, tan necesario para mantener el empleo y devolver al mercado de trabajo lo antes posible a aquellos que han perdido su empleo como consecuencia del COVID-19. En este sentido cabe destacar los datos de Lanbide que indican que más de 186.000 personas han estado en ERTE en los últimos meses y tan sólo el 57% se han incorporado a su puesto de trabajo, con una destrucción de empleo del 4% con respecto a las 186.000 personas.
De los 144.448 desempleados registrados en la Comunidad Autónoma Vasca, 79.313 son mujeres y 65.135 hombres, mientras que, 13.676 personas son menores de 25 años y 130.772 mayores de esa edad. Resulta también llamativo los datos sobre el colectivo sin empleo anterior, donde el paro ha aumentado en 1.597 personas, situándose la cifra total en 17.214, lo que supone un importante impacto precisamente sobre las personas jóvenes.
Para UGT-Euskadi es necesario seguir apostando por el Diálogo Social, vasco y estatal, que hasta el momento ha logrado por un lado, a través del mecanismo de los ERTES, frenar una destrucción de empleo masiva, apoyando a las empresas, protegiendo a los trabajadores y garantizando el mantenimiento del empleo. Por otra parte el acuerdo del Diálogo Social en Euskadi, que entró en vigor ayer mismo, se ha convertido en un instrumento fundamental para proteger a cerca de 30.000 personas de las 80.000 que se encuentran en ERTE en Euskadi, a través del complemento disponible para las personas con mayor vulnerabilidad económica, es decir, aquellas con una base de cotización igual o inferior de 20.000 euros anuales.
Los responsables de UGT-Euskadi vuelven a poner en valor por tanto el Diálogo Social, y recuerdan la necesidad de recuperar la negociación colectiva cuanto antes como instrumento para consolidar el empleo.
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